Teresa Castro actuó con “precaución” en el Congreso

Amigas y amigos, sean bienvenidos a El Acuario, un lugar donde podrán asomarse a cada una de las peceras para observar a su espécimen favorito nadar en su hábitat natural, la política.

Les adelanto que estoy tan emocionado que habrá doble columna este viernes, la que ustedes están leyendo esta mañana, y otra que publicaré en la noche.

Pero no se acostumbren, será por única ocasión ya que nos estaremos leyendo de domingo a viernes por las tardes/noches,.

Habiendo dado estos anuncios parroquiales vayamos con el tema porque les prometo que está buenísimo.

La actual secretaria de Planeación y Finanzas del Estado de Puebla, Teresa Castro Corro, compareció frente al Pleno del Congreso del Estado para hablar acerca de los 600 millones prácticamente perdidos del gobierno por invertirlos en el Banco Accendo.

Durante cinco minutos “explicó” a las y los legisladores el por qué no debían preocuparse por ese dinero, el origen del mismo y la ingenuidad de la administración estatal de ese entonces para confiar en la institución bancaria antes mencionada.

Seamos honestos, hizo su luchita, pero los argumentos que dio no fueron suficientes para todos los diputados. El coordinador del PRI, Jorge Estefan Chidiac, acusó que Castro Corro les dio la vuelta para evadir las preguntas capsiosas, y el priista que ostentó el mismo cargo que Tere durante el interinato de Guillermo Pacheco Pulido, tuvo razón, la funcionaria se salió por la tangente.

Sin embargo, a mi parecer fue un movimiento inteligente y cauteloso, ya que su discurso no estaba realmente dirigido a la legislatura local, sino al gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina. ¿Por qué lo digo? Permítanme explicarme:

Teresa Castro Corro no es alguien que se detenga a dar explicaciones a fondo, recordemos que en 2020 cuando fue confrontada en el mismo Congreso por las deplorables condiciones del horno crematorio del panteón de La Piedad y ella dijo que esa información era falsa difundida por un “periodista de mala voluntad”, el némesis del barbosismo, Rodolfo Ruiz (saludos amigo).

Sin embargo, en esta ocasión decidió explicar que el Banco Accendo fue quien les vio la cara, diciendo que otras 17 dependencias tienen litigio contra ellos, pero eso me sonó más a cuando yo sacaba 6 en un examen y para que mi madre no me regañara decía que todo el salón salió mal y que la calificación más alta obtenida había sido un 7.

Luego, para no asegurar por completo que ese dinero se va a recuperar o no, dijo que solo había un 0.5 por ciento de riesgo de perderlo. Osea que sigue habiendo una posibilidad de que se pierda, pero se escucha bonito ponerle un porcentaje muy bajo a eso.

Por último, sazonó su sofismo (verdad a medias) con el característico ataque de los funcionarios barbosistas a los gobiernos del pasado, el distractor perfecto para no asumir su responsabilidad.

¿Tuvo razón Chidiac en cuestionar el discurso de la funcionaria? Por supuesto que sí. Pero seamos honestos, lo hizo por una buena causa: mantener su chamba.

El gobernador ya demostró que no le tiene miedo a nada cuando se trata de destituir a cualquier miembro del gabinete que no de el ancho, y a la secretaria ya tienen meses señalándola como la próxima en diferentes medios de comunicación.

Un discurso donde no asuma la culpa ni tire la bolita a la administración del exgobernador Miguel Barbosa es positivo para ayudarla a continuar en el puesto el año y medio que le queda al sexenio.

Ah y ese porcentaje bajo de perder el dinero, trae un mensaje encriptado con el dicho “La esperanza es lo último que muere” acompañado de “era recurso mal usado en gobiernos anteriores”, le dio ese toque morenista con el que a lo mejor no le llene el ojo a Sergio Salomón, pero si pueda el mandatario decidir darle una última oportunidad para que en lo que resta de la administración ya no la riegue y trabaje de mejor manera.

La excusa de “no fuimos los únicos que caímos” funciona en un México que con AMLO se preocupa más por compadecer a los políticos cuando no salen las cosas como se esperan, por lo que habrá parte de la ciudadanía que saldrá a defenderla, créanme.

Teresa Castro pecó de cautelosa en su participación de este jueves, y aunque la mayoría de nosotros nos quedamos con las mismas preguntas con las que se quedó el líder de la bancada del PRI, es de reconocerse que tanta precaución puede ayudarle a quedarse al frente de las finanzas de Puebla y no agrandar la lista de funcionarios removidos de manera “salomónica”. Ojo el término si lo digo haciendo referencia a la sabiduría, no vayan a pensar mal y acuñarme palabras que nunca dije.

Por último y ya saliéndome completamente del tema, a nombre de todo el equipo joven que conformamos este medio de comunicación naciente: ¡Bienvenidos a Contundente, periodismo inteligente!